Ayer estuvimos viendo la
película “Resucitado” en Cinesur de Sevilla. Es una película de estreno en este
año 2016. Nos apetecía contemplar el mismo día del domíngo de resurrección este tema tan importante para el
cristianismo.
Toda la historia quedará retratada en el personaje Clavius (Joseph Fiennes), un centurión romano encargado de salvaguardar el nombre de Pilatos, garantizar la salvaguarda del cuerpo de Jesús y verificar el hecho de la desaparición de dicho cuerpo del sepulcro.
Bien podría llevar por título El Sepulcro Vacío puesto que la novedad de esta historia está en el atrevimiento de situarse en los movimientos alrededor de ese episodio de Jesús.
Hay muchas películas de la pasión de El Nazareno pero no tanto sobre este tramo del misterio y triunfo del sepulcro vacío. Esta es la principal novedad y riesgo de acertar.
Toda la historia quedará retratada en el personaje Clavius (Joseph Fiennes), un centurión romano encargado de salvaguardar el nombre de Pilatos, garantizar la salvaguarda del cuerpo de Jesús y verificar el hecho de la desaparición de dicho cuerpo del sepulcro.
Bien podría llevar por título El Sepulcro Vacío puesto que la novedad de esta historia está en el atrevimiento de situarse en los movimientos alrededor de ese episodio de Jesús.
Hay muchas películas de la pasión de El Nazareno pero no tanto sobre este tramo del misterio y triunfo del sepulcro vacío. Esta es la principal novedad y riesgo de acertar.
Pero el director Kevin Reynold desaprovechó en parte esta
ocasión materializando demasiado las apariciones “milagrosas” e impactantes de
Jesús vivo, siguiendo excesivamente la letra escrita en los evangelios. Porque
así contaron los evangelistas la experiencia de Jesús resucitado. Creemos que
hubiese pasado a la historia del arte si no hubiera abusado tanto de esas
imágenes y hubiera buscado, en su lugar, expresiones y escenas cinematográficas
de discípulos y seguidores que, sin
verlo en presencia corporal, vivieran la convicción de que lo del Nazareno era
una verdad, pues sentían que Jesucristo vive. Aunque estuvieran llenos de
dudas.
Para aceptar este tema
es imprescindible haber experimentado
una dimensión de consciencia trascendental a todo lo cotidiano y a lo superficial, pero que sin embargo no es menos realidad. En
ese nivel es donde pensamos que se sitúa la experiencia de Jesús resucitado. Es
el nivel de la mística tan real como la vida misma.
Mercedes y Jesús
No hay comentarios:
Publicar un comentario